Para algunos, la fotografía solo una forma de guardar recuerdos o una herramienta para compartir sus experiencias en redes sociales. Para otros, que se lo toman en serio, es una afición, un oficio o una pasión. Y para la directora y los niños y jóvenes de la Fundación Sinumar es la reivindicación con su cultura, la manera que encontraron de contar sus vidas y de proyectar su comunidad.
Al frente de todo está Dorkas Bautista, quien se define como una autodidáctica muy profesional. Ella lidera desde hace 15 años el trabajo comunitario en Brisas del Mar, un pequeño poblado frente al mar en jurisdicción del municipio de San Bernardo del Viento.
Desde la Fundación Sinumar se hacen muchas cosas: clases de surfing para los niños de la comunidad, un club de cine que ofrece proyecciones de películas con mensajes ambientales o de género todos los miércoles, talleres sobre empoderamiento de las mujeres y muchas cosas más. Una de las actividades que más interés despierta entre los niños y jóvenes es la participación en el club de fotografía.
La nave del conocimiento
Uno de los proyectos bandera de Sinumar es La nave del conocimiento, que busca despertar la curiosidad y la disciplina del aprendizaje en diferentes temas.
La fotografía ha sido desde el principio una de las prioridades. En un comienzo, las clases y las prácticas se hacían desde la conceptualización por medio de dibujos, que eran posteriormente expuestos, porque estos jóvenes exploradores no tenían cámaras. Pero eso no fue impedimento para que los miembros de Brisas del Mar descubrieran el poder de las imágenes.
Desde hace varios meses ya tienen varias cámaras y las prácticas se han vuelto muy emocionantes, sin embargo, no han dejado de lado la capacitación teórica con los recursos que tienen a su alcance. Dorkas, cada semana, plantea temas de interés a los empíricos fotógrafos. “Vemos videos en YouTube para aprender y tenemos algunos referentes en internet, así que analizamos sus fotos”.
Actualmente trabajan de forma prioritaria en tres categorías: flora y fauna, vida cotidiana y retratos.
Formación para la acción
“Lo que más necesitamos son profesores”, comenta Dorkas. Una vez tuvieron clase con dos profesores voluntarios y eso llenó de motivación al grupo. Este año, con el apoyo de la Agenda del Mar y los resultados del 14º Fotoconcurso, se busca que algunos fotógrafos profesionales visiten la comunidad y compartan su conocimiento con los jóvenes de Brisas del Mar.
María José Ospina, directora de la Agenda del Mar, dice que siempre ha admirado el trabajo de la Fundación Sinumar y por eso quiere darle un impulso al proyecto.
Por ahora se está tratando de concretar la presencia de fotógrafos de primer nivel que estén dispuestos a dictar los talleres de forma voluntaria en Brisas del Mar. De las fotos que se hagan durante las capacitaciones se escogerán algunas para hacer la primera exposición, proyecto que se espera de frutos a mediano plazo.
“Queremos que la exposición se haga primero aquí, en la plaza del pueblo, y luego en Medellín”, dice Dorkas. “No se trata solo de mostrar fotos, queremos que los niños y jóvenes puedan interactuar con la gente porque ellos han construido un discurso en torno a nuestra cultura y a la protección del medio ambiente”.
Después de 15 años de constancia y dedicación, en varios frentes de trabajo, la fotografía le dará mayor visibilidad a la Fundación Sinumar, aunque para Dorkas lo más importante no es eso, sino la posibilidad de abrirle a los niños y jóvenes de su comunidad otros horizontes y que puedan transformar realidades y construir oportunidades a partir del conocimiento.
Para conocer más sobre la labor que adelanta la Fundación Sinumar en el territorio, te invitamos a leer el siguiente artículo.