Hay imágenes que no se borran de la memoria y que son más potentes que cualquier otra forma de comunicación. Las fotos de las aves negras en medio de los derrames de petróleo, la isla de basura en el Pacífico o los peces enredados con pitillos o tapabocas; han despertado más interés que cientos de eventos y artículos especializados.
Greenpeace, por ejemplo, publicó un texto en el que asegura que “la presión pública es uno de los mecanismos más efectivos para producir los cambios necesarios en la protección de la Tierra. Queremos implicar a toda la ciudadanía para frenar la creciente degradación del medio ambiente», dice.
El biólogo y fotógrafo Jhonattan Vanegas, ganador del primer puesto en la categoría Denuncia Ambiental del Concurso de Fotografía de la Agenda del Mar 2022, explica que la fuerza comunicativa de la imagen permite “mostrarle a la gente lo que está pasando en el mundo y hacernos ver que las decisiones que tomamos día a día tienen un montón de implicaciones”.
Según dice, es muy importante llevar ese mensaje y generar empatía, para que las personas entiendan esos procesos que se desprenden de nuestras acciones cotidianas.
El reconocido fotógrafo Memo Gómez, quien ha participado como jurado del concurso de la Agenda del Mar, agrega que las imágenes hacen que “nos vamos sensibilizando cada día más y vamos haciendo propio este conocimiento sobre los ecosistemas para que se mantengan los equilibrios en el planeta”. Al fin y al cabo, conocer la realidad de la degradación ambiental es el punto de partida para entender los retos que tenemos como especie.
Para el fotógrafo madrileño Alfonso Domínguez Lavín, el papel de la fotografía es determinante en este momento histórico para la humanidad: “Se realizan conferencias sobre el calentamiento global, el desarrollo sostenible, el abastecimiento de agua, la deforestación y otros aspectos de la crisis global. Pero el día a día de la supervivencia de la mayor parte de la humanidad, la sed de riqueza de una minoría significa que, en la práctica, estos problemas fundamentales sólo se abordan superficialmente. Hemos perdido el contacto con la esencia de la vida en la tierra. Pero también la fotografía está para influirnos en ello. Para recordarnos que el Planeta Tierra es cuestión nuestra, de todos”.
Galería ganadora de la categoría Denuncia ambiental en el 2010, por Bernardo del Cristo Hernández Sierra, tomada en Cartagena, Colombia.
La Agenda del Mar organiza cada año, con el apoyo de las empresas aliadas, un concurso de fotografía que este año llega a su versión número trece.
“La categoría de denuncia ambiental en el Concurso de Fotografía de la Agenda del Mar es supremamente importante porque es el punto de partida para muchas cosas, es la motivación para que muchas personas hagan fotografía de denuncia ambiental y empiece a contar lo que está sucediendo en el país”, dice Jhonattan Vanegas, ganador de esta categoría en 2022 con una serie de imágenes de un tití cabeciblanco, captadas en Turbo, Antioquia.
Las bases para quienes quieran participar las encuentran aquí Concurso de Fotografía
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