Por: Jorge Herrera, biólogo marino.
En nuestro país, entre el 16 de mayo y el 8 de junio, se llevó a cabo la cría de larvas y siembra de nuevos pólipos de esta especie en el Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo (PNNCRySB).
Este trabajo contó con la participación, de una u otra forma, de varias instituciones que, de hecho, son las mismas que han venido trabajando desde hace varios años, lideradas por la Doctora Elvira Alvarado, alma de este proyecto. Nos referimos a ONGs como Ecomares y Secore, instituciones como Parques Nacionales Naturales de Colombia, la Universidad Jorge Tadeo Lozano y la Universidad del Magdalena y empresas como el Oceanario de las Islas del Rosario, el centro de buceo Diving Planet y, por supuesto, la Agenda del Mar.
El día 16 de mayo (11 días después de la luna llena de este mes), se monitorearon un total de 74 colonias, localizadas en 3 diferentes zonas del parque. Del total de colonias observadas, 14 liberaron gametos y una parte de ellos fue recolectada y llevada al laboratorio del Oceanario para la fertilización asistida.
Luego del proceso de fertilización, se obtuvieron, aproximadamente, unos 800.000 embriones que fueron repartidos en 5 experimentos, 2 de ellos en guarderías flotantes, directamente, en el mar y 3 en laboratorio. Al mismo tiempo, se hizo el seguimiento del desarrollo embrionario, documentando cada estadio, hasta la obtención de larvas.
Al cabo de 2 semanas y, de acuerdo a las observaciones bajo el estereoscopio, un total de 6223 larvas ya se habían asentado en los sustratos que se les suministraron y ya se habían convertido en nuevos pólipos, resultado muy importante, según nos cuenta Elvira Alvarado, si se comparan los obtenidos en los años anteriores, por un lado, se ha aumentado, significativamente, el porcentaje de larvas criadas y, por otro lado, que miles de ellas hayan sobrevivido hasta el asentamiento, una etapa crítica en el desarrollo temprano de esta especie, es un muy importante. Desafortunadamente, por varias razones, naturales y dificultades propias de los diferentes experimentos que se llevaron a cabo, una gran parte de ellas murió antes de ser trasplantadas al arrecife.
Finalmente, el 8 de junio se trasplantaron un total de 60 pólipos viables, convertidos en reclutas con esqueleto ya formado y con zooxantelas en sus tejidos, los precursores de nuevas colonias que van a contribuir al esfuerzo de restauración de nuestros arrecifes.
Pero el trabajo no terminó aquí, los días 14 y 15 de junio, varias colonias de esta especie liberaron gametos y parte de ellos, como en mayo, fueron recolectados y llevados al Oceanario para la fertilización asistida. Una vez se logró este primer paso, todo el material fue sembrado en las guarderías flotantes, directamente, en el mar. Hasta el momento de escribir este artículo, las larvas están en pleno desarrollo y se espera obtener el mayor número de reclutas posible de esta especie que se sumen a los ya trasplantados al arrecife el pasado 8 de junio.
Como conclusiones de esta primera etapa del año, de trabajo con reproducción sexual de la especie de coral cerebro (Diploria labyrinthiformis), nos cuenta Elvira Alvarado que a pesar del, “aparentemente”, bajo porcentaje de reclutas obtenidos y trasplantados vs el número de embriones obtenidos con la fertilización, ese valor es muy significativo si se mira en términos de número total de reclutas para un área de siembra determinada.
Hoy en día, es muy raro ver colonias juveniles en el arrecife; al sembrar un número determinado de nuevos reclutas, de todas formas, se está aumentando el número de juveniles a futuro. Por otra parte, el trabajo permite obtener una enorme cantidad de embriones de muy pocas colonias y lograr un porcentaje de fertilización mucho más alto, ambos aspectos que en la naturaleza no se dan. En fin, estamos en ese proceso de aprendizaje, cada vez se obtienen mejores resultados, y en este caso, no solamente, se obtuvieron larvas, sino que se vio un asentamiento muy significativo. Cada fase del proyecto trae nuevas enseñanzas y se espera tener mejores resultados en septiembre cuando se de la liberación de la mayoría de las especies con las que se está trabajando. Pero eso será otra historia que ya te estaremos contando.
Por ahora, queremos también invitarlos a ser parte de este proyecto. Con un equipo de ilustradores, biólogos, comunicadores, y demás, creamos una Guía digital de peces óseos del Caribe, donde podrán ver todos los animales que dependen de estos corales que estamos reproduciendo. Con la compra de algunos de los kits con la guía, estarás donando directamente a que podamos continuar con esta historia y restaurar los arrecifes coralinos del Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo (PNNCRySB).
¡BUEN VIENTO Y BUENA MAR!
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