¡Hola! Mi nombre es Octopus Vulgaris, ¿me recuerdas? No soy quién se despidió hace varias ediciones de este maravilloso mailing, ya que su ciclo de vida llegó a su fin. Pero sí hago parte de su descendencia y con el fin de conservar su legado, vengo a hacerte una invitación a ti, lector del Correo de Ultramar.
Mi ancestro cumplió durante dos años con la misión de enseñar un poco más sobre nuestro entorno, las especies con las que compartimos hogar y cómo ustedes, los que viven en la superficie, pueden hacer parte de la conservación y protección de nuestro entorno vital.
Es por esto que hoy vengo a proponerte un reto relacionado con la misión que ejecutan desde Agenda del Mar: promover la conservación oceánica desde la educación y la divulgación científica… Para entender cómo puedes aportar a transformar una realidad es necesario que la comprendas primero. En este orden de ideas, la invitación que te quiero hacer para el mes de octubre, como invitado especial de la Agenda, es a que consumas más contenido científico.
Las personas de ciencia trabajan arduamente por comprender los fenómenos que atentan contra la salud de los océanos y el medio ambiente en general, mientras buscan posibles soluciones para las consecuencias que estos generan. Es por esto que la divulgación de esta información es vital, ya que tiene el fin de generar una conversación con aquellas personas que no tienen un contacto directo con este conocimiento, pero que finalmente están directamente afectadas por todo lo que pasa con el medio ambiente: el planeta es de todos.
Me he enterado, gracias a una conversación que tuve con varios especialistas en el tema, que la divulgación científica tiene como objetivo sintetizar la información que puede ser compleja de entender para quienes no hacen parte del mundo de la ciencia, en términos sencillos para el entendimiento de cualquier lector.
Fotos: Nathalie Ramírez
Valeria Pizarro, investigadora The Perry Institute for Marine Science y miembro de Ecomares, me habló un poco más de la importancia de la relevancia de que los científicos compartan sus descubrimientos con el resto de la sociedad: ‘no solo busca contar las malas noticias, sino también las buenas, como cuando se recupera una población gracias a las medidas de conservación’.
Según ella, esto abre las puertas a la posibilidad de que la gente conozca, no solamente lo que los científicos están haciendo, sino lo que cada uno puede hacer desde su ‘esquina’. Además de brindarles herramientas para pedirle a los tomadores de decisiones, bien sea el gobierno o a diversas autoridades ambientales, que tomen acciones reales de conservación para disminuir el impacto para conservar el medio ambiente.
‘La divulgación científica para la gente es lo más importante porque o si no los científicos nos quedamos hablando entre nosotros, y aunque nosotros queramos hacer muchas cosas, la realidad es que el movimiento de las masas puede generar cambios reales’ afirma Valeria.
Es por esto que te traigo una serie de acciones que puedes implementar en tu día a día para conocer más sobre el mundo de la ciencia:
1. Leer artículos de divulgación científica: busca revistas, blogs y plataformas que traduzcan investigaciones complejas en un lenguaje sencillo.
2. Seguir a científicos y divulgadores en redes sociales: Twitter, Instagram o YouTube son buenas fuentes para obtener información actualizada y accesible.
3. Escuchar podcasts científicos: encuentra programas que hablen de temas como biología, ecología y medio ambiente en un formato dinámico.
4. Participar en charlas o seminarios en línea: muchos científicos y organizaciones ofrecen webinars o masterclass sobre temas actuales de conservación y ciencia.
5. Visitar museos o centros de ciencia: estos espacios suelen ofrecer exposiciones interactivas y actividades para aprender más sobre el mundo natural.
6. Ver documentales sobre temas científicos: hay muchos documentales accesibles que abordan problemas ambientales y soluciones basadas en la ciencia.
7. Unirse a actividades de ciencia ciudadana: puedes contribuir directamente participando en proyectos que involucren a voluntarios para la recolección de datos sobre el medio ambiente.
8. Leer libros de divulgación científica: existen excelentes libros que explican temas complejos de manera entretenida y educativa.
9. Conversar sobre ciencia en tu círculo social: llevar temas científicos a tus conversaciones diarias ayuda a crear conciencia entre familiares y amigos.
10. Apoyar organizaciones que promueven la conservación y divulgación científica: participa en campañas, apoya a organizaciones locales y colabora en la difusión de sus mensajes.
Mi familia me ha contado que hablar con ustedes es todo un placer, así que espero leer qué piensan de este tema y confíen en que volveré pronto para compartirles todo lo que pueda sobre el océano y sus secretos.