Por: Maria José Ospina, directora Agenda del Mar
El cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la acidificación de los océanos, entre otros, me parecen devastadores y trato de luchar con esa eco ansiedad presente en cada uno de mis días. Adicionalmente, hay una problemática que, aunque no podemos resolver, estoy convencida pienso que sí podemos incidir en ella con pequeñas acciones en el día a día, y es la basura marina.
Las cifras son aterradoras:
- Si Cristóbal Colón hubiera traído plásticos en su viaje del descubrimiento es muy posible que esos residuos todavía estuvieran por ahí en algún lugar de nuestro continente.
- Casi el 50% del plástico producido se convierte en productos con una vida útil menor a 3 años
- En el mundo cada minuto se compran un millón de botellas de plástico y se consumen 10 millones de bolsas plásticas.
- Se estima que cada año una persona consume 250 gramos de microplásticos = 100.000 micropartículas. Es como si nos comiéramos el equivalente a una tarjeta de crédito cada semana.
- A nivel mundial, solo se recolecta el 20% de los desechos plásticos para reciclaje.
- En el 2050 los océanos tendrán más plástico que peces en términos de peso y el 99% de las aves marinas lo habrán ingerido.
Lo que me encuentro en la playas, manglares y en el mar es abrumador: ríos de plástico flotando en el océanos, playas desiertas llenas de basura, redes que asfixian a las especies marinas, millones de partículas suspendidas en el agua; no me quiero imaginar qué se sentiría si de un momento a otro nuestros hogares se vieran inundados de basura invadiendo nuestros espacios vitales.
Desde hace más de 10 años este tema me da vueltas en la cabeza. Hablando con grandes amigos del mar, buscando soluciones y poniendo a “pensar a la gente” en cómo encontrar una solución viable a un problema sin solución aparente, decidimos embarcarnos en Octopus, un proyecto que nace desde el corazón para encontrar cómo disminuir la marea de plásticos que ahoga los océanos.
Si en las ciudades con todos los recursos disponibles y con grandes empresas trabajando para “desaparecer” nuestros residuos nos encontramos basura en muchas partes, imagínate que pasa en esos lugares alejados, de difícil acceso, sin grandes recursos a los que llegan todos los días miles de productos de consumos empacados en plástico. Ahí está el problema, cómo reducir el consumo, cómo sacar esos residuos que se generan todo el tiempo, cómo lograr que todos entendamos que el mar empieza en casa y que no es un botadero sin fondo.
Son varios frentes, ideas de trabajo, son muchos los recursos que requerimos para poder encontrar soluciones lógicas, prácticas y sostenibles en el tiempo. Educación, Green marketing, REP (Responsabilidad Extendida del Productor) , ley de plásticos de un solo uso, bonos plásticos, entre otros. Hoy nuestro gran reto es cómo conseguir los recursos para sostener esta labor quijotesca en el tiempo, ¿cómo comprometer a las empresas con las soluciones que planteamos en la recolección de residuos, que muchas veces son de pocas toneladas y que no cumplen con las necesidades de la industria que requiere de muchas toneladas para cumplir con las normas ambientales?
Por esto queremos desarrollar un modelo de negocio para crear y fortalecer empresas sociales de reciclaje basadas en la economía circular que sean sostenibles en el tiempo. La educación, la innovación y la economía circular son nuestros grandes pilares. Así que empezarás a escuchar que la Agenda del Mar con Octopus hacen limpiezas, desarrollan proyectos de educación, trabajan con redes de reciclaje, donde los recicladores juegan un papel fundamental.
Si quieres sumarte, estás bienvenido. Necesitamos personas que sueñen con nosotros para lograr que pequeñas acciones sostenidas en el tiempo generen grandes cambios.
