Hola amigo lector. Nuevamente juntos para compartir mis experiencias y vivencias sobre lo que ocurre en nuestro arrecife de coral. Tristemente, hay algo que ha estado sucediendo estos últimos 2 meses, no solo en nuestro arrecife, sino en todo el Caribe, algo que podría ser fatal para una gran parte de los grandes corales que han participado en la construcción del arrecife: el blanqueamiento coralino. Por eso quise invitar, nuevamente, a mi amigo coral y quiero que sea él mismo quien te cuente lo que está sucediendo.
C/ Gracias amigo Octopus. Como te conté en el pasado, los corales somos animales que vivimos en colonias, con cientos o miles de pequeños pólipos idénticos; juntos formamos un esqueleto de carbonato de calcio y crecemos de una manera u otra para construir lo que se conoce como arrecife de coral. También te conté que desde que somos bebés adquirimos unas algas unicelulares microscópicas llamadas zooxantelas que adherimos a nuestros tejidos. Estas zooxantelas, como plantas, producen su propio alimento y parte de él lo comparten con nosotros, principalmente, azucares y otros compuestos esenciales para nuestra vida, convirtiéndose en nuestra principal fuente de energía, lo que nos ha permitido construir estos grandes y hermosos arrecifes por millones de años. Por nuestro lado, les damos refugio y nuestros desechos (nitratos y fosfatos) son aprovechados por ellas para su sobrevivencia. Además, las zooxantelas son las que nos dan el color, que en el Caribe predomina, principalmente, el marrón más claro o más oscuro y en ocasiones con variaciones hacia el verde o anaranjado.
Lo que está ocurriendo por todos lados es que estamos perdiendo nuestro color, nos estamos blanqueando. La causa principal es el incremento de la temperatura del agua. En la superficie, la temperatura puede alcanzar los 32 a 33 °C, para encontrar temperaturas de 30 °C hay que descender a más de 10 m de profundidad. Resulta que cuando la temperatura del agua sube por encima de los 30 °C, las zooxantelas, tan benéficas para nosotros en condiciones normales, producen compuestos que son dañinos para nosotros, por lo que no nos queda otra opción que expulsarlas para que vuelvan a su medio natural que es la columna de agua. Es por eso que empezamos a blanquearnos; nosotros los pólipos somos transparentes y el esqueleto que producimos es blanco puro.
El gran problema es que, al perder o expulsar las zooxantelas, perderemos esa fuente de energía que obtenemos gracias a estas y, aunque seamos capaces de alimentarnos por nosotros mismos, capturando pequeños animales del zooplancton, si la alta temperatura permanece mucho tiempo, llegará el momento en que ya no podamos suplir nuestras propias necesidades alimenticias y muramos, literalmente, de inanición.
Si la temperatura del agua vuelve a bajar a sus valores normales de 28 °C, podemos reabsorber las zooxantelas, recuperar nuestro color y volver a nuestro estado de buena salud.
O/ Permíteme te interrumpo y es que, precisamente, hablando sobre este tema con mi amigo biólogo, él me contaba que, no solo la temperatura del mar no va a bajar muy pronto, sino que, tristemente, se espera que suba uno o dos grados más en los próximos dos o tres meses. Me contó que hace un mes aproximadamente, se presentó un evento de calentamiento inusual en la Bahía de Manatee en los cayos de la Florida, Estados Unidos, que superó los 38 °C; los corales ni siquiera tuvieron tiempo de blanquearse, literalmente, murieron cocinados. Yo he estado recorriendo todo el arrecife del Parque Corales del Rosario, mi hogar y he visto que más del 90% de las colonias de coral cerebro ranurado (Diploria labyrinthiformis) están, completamente, blanqueadas; además de blanqueamiento en otras especies muy importantes, corales dedo, lechuga, los corales de fuego, los corales estrella, en fin, un panorama muy triste.
C/ Esa no es una buena noticia, amigo Octopus. Yo pertenezco a una colonia de la especie de coral estrella lobulado (Orbicella annularis) y junto con mis hermanos gemelos aún no hemos tenido que expulsar a nuestras aliadas la zooxantelas ya que vivimos a 10 m de profundidad donde la temperatura aún no alcanza esos 32 °C que están sufriendo mis hermanas que viven a menor profundidad (3 a 4 m).
Ahora bien, hay algo que nos preocupa sobre manera y es que estamos a pocos días de liberar nuestros gametos al medio para la reproducción sexual como te conté hace casi un año cuando estuvimos conversando y contándole a nuestro amigo lector sobre los corales. Debido al blanqueamiento, al haber perdido esa fuente de energía que nos proveían las zooxantelas, esos huevos y el esperma (sobre todo los huevos que contienen un alto contenido de grasa), que ya están, prácticamente, listos para ser liberados, van a tener que ser reabsorbidos por esas colonias afectadas para obtener energía y poder sobrevivir. Por lo tanto, la reproducción sexual, tan importante para la sobrevivencia de las especies, se va a ver comprometida, generando otro problema más a nuestra, ya, grave situación.
O/ No sobra insistir que todo esto que está ocurriendo, amigo lector, se debe al calentamiento de nuestro planeta que, estoy seguro, conoces sus causas. Espero poder volver a conversar contigo, mi amigo coral, en un futuro no muy lejano.
Ahora más que nunca, es muy importante – y esto, específicamente, va para ti amigo lector -, apoyar a nuestros amigos científicos dedicados a tratar de salvar a nuestros corales. Aprovechando este espacio, mi editora, la Sirenita, me dice que una forma de apoyar una de estas iniciativas es a través de la compra de una guía virtual de peces óseos del Caribe colombiano, una guía llena de ilustraciones y fotografías muy hermosas de las especies mencionadas, además de contener información muy útil sobre sus tallas, en qué parte del arrecife las puedes encontrar, su comportamiento natural y reacción frente a los buzos, en fin, una guía que seguro vas a disfrutar muchísimo. La puedes adquirir en Guia de peces
Bueno, me despido de ti, amigo lector, esta vez con una gran tristeza y preocupación por lo que está sucediendo en nuestros arrecifes. Un óctopus-abrazo para ti y…
¡BUEN VIENTO Y BUENA MAR!
