El océano Ártico está amenazado por las petroleras, la pesca industrial y la guerra, pero entre todos podemos salvarlo. De eso está convencida la ONG Greenpeace, que lanzó la campaña global Save the Arctic.
A través de ella se busca recoger un millón de nombres de habitantes del Planeta que serán escritos en una cápsula indestructible que se pondrá en el fondo del océano, con una bandera para el futuro diseñada por jóvenes de todo el mundo.
"Mostrará que nuestra visión de un medio ambiente sano y un mundo en paz, comienza a construirse con nuestro compromiso en la protección del Ártico" señala Greenpeace en la página web de Save the Arctic.
Pero la bandera es sólo un símbolo. La idea es reclamar a las Naciones Unidas un acuerdo global para proteger el Ártico, que hoy se está derritiendo por el uso de combustibles fósiles y, en un futuro cercano,la región podría quedarse sin hielo por primera vez en la historia del planeta.
Lo anterior "no sólo sería devastador para los pobladores, los osos polares, los narvales y las morsas, sino también para todos nosotros. El hielo del ártico refleja los rayos solares proyectándolos al espacio, manteniendo el planeta frío y estabilizando los sistemas climáticos de los cuales dependemos para producir nuestro alimento. Proteger los hielos polares significa protegernos a todos nosotros", indica la campaña.
