“Iota destruyó absolutamente todo”, dice cada uno de los habitantes de Providencia consultados. Aquel día dividió en dos la historia de la isla. Y el turismo, una de sus principales actividades económicas, se desplomó de la misma manera que las coloridas casas tradicionales de madera.
Pero llegó la hora de volver. La Alcaldía de Providencia y Santa Catalina expidió el decreto 025 de 2022 en el que estableció la fecha del 23 de junio para la reapertura al turismo.
Alejandro Archbold, de la escuela de buceo The Dive Shop Old Providence, celebró el anuncio porque, según explicó, “el buceo es uno de los que ha sufrido más y esta medida busca activar un poco este sector, pues este piloto es únicamente para buzos”.
Daniel Gutiérrez, de la escuela Sirius Dive Center, coincide en que las empresas que trabajan con buceo han sido las más afectadas: “Las escuelas la hemos pasado mal, los hoteles han alojado a las personas de la reconstrucción y de esa forma han logrado estar mejor, pero nosotros no recibimos un cliente hace más de año y medio”.
El alojamiento
Fotografía de Daryl Lung @madeinparadisefilms
No todos los hoteles están funcionando, pero sí hay suficiente capacidad para recibir a los visitantes. Ya están habilitadas unas 15 posadas que están en capacidad de alojar a unos 150 huéspedes en total.
Zunny Orozco Archibold, de la posada Mis Francia’s home, ubicada en Santa Catalina, se siente emocionada y asegura que las islas están quedando “hermosísimas”, por lo que los primeros viajeros se van a sorprender. “Para el programa piloto vamos a tener en su mayoría a buzos que son recurrentes, aquellos que han venido a Providencia muchas veces y quieren apoyarnos. También hemos tenido mucha ayuda del Gobierno Nacional por parte de Fontur y de otras organizaciones. Las habitaciones parecen nuevas”, dice.
Una de esas organizaciones es Antioquia Presente, que desde el momento de la tragedia llegó con un equipo de profesionales de diferentes disciplinas para apoyar las tareas de reconstrucción. “Una de las 5 líneas estratégicas de trabajo era la de proyectos productivos y dotación de posadas nativas. El Gobierno Nacional se encargó de la infraestructura y nosotros de la dotación”, precisa Nicolás Ordóñez, director ejecutivo de la Corporación Antioquia Presente.
No todo está listo, el acceso a algunos servicios y atractivos es limitado. En este piloto no habrá turismo de playa ni de senderismo. Sin embargo, la llegada de los primeros visitantes se espera con entusiasmo en Providencia y Santa Catalina. Será una fiesta, además, porque se compartirá con los buzos del país, aquellos que conocen y aman sus aguas. El camino a la recuperación del turismo, ha comenzado.
