El 2 de Febrero se celebra el Día Internacional de los Humedales en conmemoración de la firma del Convenio sobre los Humedales en la ciudad de Ramsar – Irán en el año de 1971 y con el cual se busca destacar la importancia de estos ecosistemas.
¿Qué son los humedales?
Según el Convenio de Ramsar, un humedal es una zona de la superficie terrestre que está temporal o permanentemente inundada, regulada por factores climáticos y en constante interrelación con los seres vivos que la habitan.
Ciénagas, esteros, marismas, pantanos, turberas, así como los manglares (zonas de costa marítima que presentan anegación periódica por el régimen de mareas) se consideran humedales.
Según el artículo 1 del párrafo 1, se consideran humedales, "las extensiones de marismas, pantanos y turberas, o superficies cubiertas de aguas, sean éstas de régimen natural o artificial, permanentes o temporales, estancadas o corrientes, dulces, salobres o saladas, incluidas las extensiones de agua marina cuya profundidad en marea baja no exceda de seis metros".
Además la Convención Ramsar con el objetivo de proteger y conservar sitios adyacentes o que tengan relación, estipula que los humedales que se incluirán en la Lista de Ramsar de Humedales de Importancia Internacional: "podrán comprender sus zonas ribereñas o costeras adyacentes, así como las islas o extensiones de agua marina de una profundidad superior a los seis metros en marea baja, cuando se encuentren dentro del humedal".
Beneficios ecosistémicos de los humedales
La ONG SEO/BirdLife recuerda que entre los servicios que aportan los humedales gestionados adecuadamente, están algunos tan importantes como:
- La producción de alimento
- La disponibilidad de agua en cantidad y calidad
- La protección frente a fenómenos extremos como las inundaciones, sequías o temporales costeros,
- El turismo
- La lucha contra el cambio climático.
Según el informe 'The Millennium Ecosystem Assessment' los servicios que nos aportan los humedales han sido valorados a nivel mundial en más de 11 trillones de euros al año.
Asimismo, la ONG señala que existen más de 100.000 especies de animales identificadas en los humedales de agua dulce del mundo, y cada año se descubren unas 200 nuevas especies ligadas a estos ecosistemas.
Humedales en Colombia
Foto de Juan Pablo Álvarez – Primer Concurso de Fotografía Agenda del Mar
La región Caribe contiene el 71% de los grandes humedales, destacándose los complejos de la Ciénaga Grande de Santa Marta, Depresión Momposina, Magdalena Medio y Río Atrato. La Orinoquia y Amazonia, con solo siete y seis complejos respectivamente, cada uno de ellos abarca una superficie de magnitud comparable a algunos del Caribe.
En la región andina destacan las lagunas de Tota, Fúquene y La Herrera, además de pequeños pantanos de considerable importancia biogeográfica. También los humedales altoandinos de los páramos.
En el mapa de humedales del país, existen especies de flora y fauna, aves endémicas y migratorias que hacen escala en muchos humedales de interés nacional e internacional. En los humedales ubicados en el área inundable de los ríos Bogotá y Salitre se pueden encontrar curíes, murciélagos migratorios, tinguas, cucaracheros de pantanos y chorlos playeros.
Según el programa Su madre naturaleza, del Canal Capital, la mayoría de los humedales urbanos y rurales en las diferentes regiones de Colombia están amenazados, unos altamente contaminados, otros en peligro de extinción, y unos pocos en franca recuperación gracias al compromiso de vecinos y entidades asociadas.
La expansión y los costos del suelo urbanístico, las actividades de la agricultura en grandes extensiones de tierras y "baldíos" (tales como cultivos de palma, flores, caña, entre otros), la minería de oro, explotación petrolera y minerales en los llanos y los páramos, la construcción de rellenos de acuíferos para vías y carreteras como la descomunal periférica en la isla de Barú que saturó el manantial que provee agua dulce a las comunidades del pueblo son, entre otras, las amenazas para esteros, morichales y ciénagas.