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Así terminó la temporada de regatas del Club de Pesca en Cartagena

El pasado sábado 11 de mayo, coincidiendo con la ida de los vientos alisios, finalizó la temporada de regatas multiclase de cruceros más importante navegada en mares colombianos.

Por: Capitán de Navío (r) Jorge Prieto Diago

Finalizó en Cartagena la edición N° 16 de la temporada de regatas organizada por el Club de Pesca y Agenda del Mar presenta los resultados y análisis por categorías. 

Si quiere saber sobre hándicap, por qué categorías IRC y NHC, entender cómo se puntualiza y significado de descarte, lea nuestro artículo Temporada de regatas 2018

 

Tabla final de resultados IRC

Primera serie

La primera serie de 2019 fue ganada por el “Bye Luby”, un Beneteau First 36.7  que desde 2015 está ganando regatas esporádicamente, pero este año llegó con la intención de ganar por primera vez una serie y gracias a la constancia lo logró. Sus armadores, los españoles Juan Pastor (patrón) y Javier Gamundi (timonel), completaron la tripulación base con Santiago Noero, Gonzalo Correal y la inglesa Portia Hard. El resto de la tripulación tuvo alta rotación, por allí pasaron el experto proel Diego Rodríguez, el joven Thomas Ponsford y los oficiales navales Sebastián Zárate y Sharoon Beltrán. El “Bye Luby” ganó en una competida serie, en la que cinco de los siete veleros que estuvieron constantes ganaron al menos una regata.

En el segundo puesto, a dos puntos, se ubicó el “Magic Bus”, que vino de menos a más. Arrancó el año con un quinto puesto entre siete veleros, pues al parecer la tripulación no se había acoplado a nueva Génova 140 que no los dejaba trimar bien la vela mayor y que los castigó en el hándicap, sin embargo regata a regata se vio la mejoría y el uso de un foque en vez de la Génova optimizó el rendimiento del Magic que se acercó bastante al primer puesto.

El “Sue” de Rafael Del Castillo quedó en tercer lugar de la serie. La falta de constancia le impidió llegar al primer puesto. Inició ganando la primera regata y ganó la última en la que supo aprovechar los fuertes vientos de esa tarde, favorables para este 50 pies.

El Kolé Seré y el Bye Luby, este último ganador de la primera serie

Tripulación del Bye Luby

Segunda serie

La segunda serie de 2019 la ganó el “Magic Bus”, Beneteau First 40.7 que con una tripulación entrenada encontró el equilibrio de las nuevas velas en un barco de competencia que no perdona errores en su manejo. El “Magic Bus” de la segunda serie fue el equipo más regular de la temporada, estuvo siempre en el podio y desde la tercera regata se ubicó en el primer puesto. Antes de la última regata ya era campeón y al final la emoción de la categoría se centró en la pelea por el segundo puesto entre el “Bye Lubie”, el “Kolé Seré” y el ARC “Antares”.

La celebración en el “Magic Bus” fue grande pues no ganaban una serie desde 2016. La tripulación base de este año estuvo conformada por Diego Canelos, patrón que con un pie inmovilizado estuvo a la caña dando la batalla, de táctico lo acompañó el francés Jerome Hilt, José Saladen tuvo la responsabilidad de manejar la mayor que es bastante exigente en este velero, Jorge Prieto que ocupó el piano tras la lesión de Diego Canelos, en las escotas iban Julián Ramírez, la francesa Pamela Pellacoeur y el oficial naval David Rodríguez, los proeles Fernando Murillo y Héctor Murillo, y como tripulantes esporádicos rotaron Julie Ballesteros, Nehilin Navarro y Diana Zapata.

El segundo lugar fue para el “Bye Lubie”, que tuvo una serie con altibajos, pues logró dos primeros puestos, pero también tuvo un sexto entre ocho y un séptimo entre siete. El subcampeonato lo logró en la última regata, en la que llegó de primero en el agua sacando 13´35” al “Kolé Seré” y 55´ 41” al ARC “Antares”, veleros con los que estaba disputando el podio.

En tercera posición quedó el “Kolé Seré”. Aunque tenía los mismos puntos que el “Bye Lubie”, el desempate fue para el que ganó más regatas. El 4° y 3° puesto del “Kolé Seré” en las dos series de 2019 abre interrogantes, pues en 2018 fue campeón absoluto ganando sobrado las dos series de la temporada. No estamos acostumbrados a ver fuera de la competencia por el primer lugar a un velero rápido como es el Beneteau First 44.7, que es navegado impecablemente con la experiencia de Lucho Mogollón y Wolfgan Ripoll. También es claro que no les ayudó la descalificación que tuvieron en la segunda regata al perder una protesta que ellos mismos presentaron contra el ARC “Antares” y el “Navarrete”, y que al final se les volvió en contra. Hubiera sido preferible penalizarse por las dudas.

En conclusión, el nivel técnico de la flota IRC está mejorando notablemente. Por fuera del podio quedaron veleros que ganan regatas, como los Oceanis 38 de la Escuela Naval que lograron el 4° y 5° lugar; el “Navarrete”, J 88 que no hace mucho ganó de forma memorable la regata de regreso de Cholón, el “Sue” que en la primera serie ganó dos regatas y el “Alegría” navegado por expertos y que hace un año ganó su última regata. El hándicap IRC muestra ser un buen método de compensar tiempos, pues los que están ganando son los armadores que tienen bien apertrechados sus veleros y tripulaciones que no cometen errores.

Magic bus

Tripulación del Magic Bus

Tabla final de resultados NHC

La categoría NHC fue dominada completamente por el Velero “Nepentes” que ganó las dos series, con Santiago Madriñan (patrón, caña, proel), Hank Brady (táctico, caña), Roberto “Chespirito” Meza (contramaestre), Ricardo Sánchez (mayor), Alesandro Basile (proel) y María Paula Contreras (proel). Es importante recordar que este hermoso clásico es un Arpage 30 del año 1971, uno de los primeros veleros que se vendió en forma masiva en el mundo. En Colombia ha estado ligado a la historia de las regatas, pues navegó con el nombre de ARC “Antares” representando a la Armada Nacional en cuatro regatas a finales de los años setenta e inicio de los ochenta, y después con Lucho Mogollón que en tres décadas ganó sesenta y seis premios. Su dueño desde hace cuatro años, Santiago Madriñan, se declara albacea de un bien náutico y lo mantiene como tal.

En febrero de 2019, el «Nepentes» después de casi dieciséis años vuelve a ganar una regata, pues aunque habían tenido dieciocho premios en ese tiempo, la última ganada había sido en junio de 2003. Este año siguió ganando pues completó entre las dos series seis primeros puestos en diez regatas. Esto despertó muchas preguntas y hubo competidores directos que manifestaron inconformismo pues dicen que el sistema de hándicap NHC favorece al «Nepentes». Profundizando el tema, sabemos que el velero estuvo en reparaciones mayores durante seis meses, en los cuales no hubo cambios de diseño, pero sí dejaron casco, estructura y jarcia en perfecto estado, compraron velas nuevas y la tripulación entrena.

Así las cosas, el hándicap IRC no se modifica a no ser que se hayan cambiado las dimensiones de las velas, y las reglas para toda la flota NHC fueron las mismas. Todos empezaron temporada con el hándicap final de 2018, en el caso del Nepentes con el de 2017.

Ahora bien, leyendo detenidamente el reglamento de hándicap variable NHC, es recomendable que el hándicap obtenido al final de una temporada no se vuelva a utilizar, y se arranque cada temporada con la base IRC. Esto tiene toda la lógica, pues los veleros varían enormemente antes de una temporada, en siete meses hay cambios en tripulaciones completas y cambios de rendimiento del velero por mantenimientos.

En todo caso no es culpa del “Nepentes” ganar de acuerdo con las reglas establecidas, y ellos no tienen injerencia en el comité que determina los lineamientos. Simplemente hicieron lo que tenían que hacer, velero bien mantenido y apertrechado, tripulación entrenada y sobre todo el espíritu marinero y la pasión que se respira a bordo.

Dejando de lado el caso del “Nepentes”, encontramos que la competencia interesante en la categoría NHC fue entre los veleros de la Escuela Naval por el segundo puesto; en la primera serie lo obtuvo el ARC “Antares”, un Beneteau Oceanis 38, con el instructor italiano Luiggi Prizzon como patrón; el ARC “Antares” en la segunda serie vio más posibilidades de ganar participando en categoría IRC y allí quedó en el cuarto lugar (recordamos que las categorías son voluntarias).

Los dos Veleros “ENAP 7.5” presentaron una interesante competencia pues el N° 02 con el Cadete Hollman Manosalva de patrón logró el tercer puesto en la primera serie y el cuarto en la segunda serie. Manosalva es el navegante de vela ligera (Sunfish) mejor posicionado en este momento en la Escuela Naval, y el “ENAP” 7.5 N° 1, con el cadete Suárez Santos de patrón, obtuvo el quinto puesto en la primera serie y el segundo puesto en la segunda serie.

Los ENAP 7.5 son un diseño del ingeniero naval colombiano Ricardo Mejía, fabricados en el astillero Cotecmar en Cartagena. Navegan desde 2015 en aguas de la bahía, es interesante ver como estos pequeños de 7.5 metros vencieron incluso sin ayuda del hándicap a modelos de Beneteau y Jeanneau. Si siguen con el nivel de disciplina y entrenamiento que tienen sus cadetes, seguramente alcanzarán un campeonato en la temporada 2020.

El otro velero que en esta categoría alcanzó podio en la temporada fue el ARC “Tres de Julio”, el tercer Oceanis 38 de la Escuela Naval. Este prefirió competir en NHC las dos series, obtuvo el tercer lugar en la segunda serie. Con el Guardiamarina Lugo y el Guardiamarina Amaya alternando como patrones, vencieron a veteranos de la vela navegando en otros Oceanis como el “Sea Duction”, el “Athenea”, y el “Breakaway”, e incluso a veleros más rápidos como el “Oh La La”.

Nepentes

ARC Antares
 Semillero de navegantes para Colombia
  • En la vela de crucero las generaciones son largas pues encontramos tripulaciones ganadoras de todas las edades. El más veterano, Luis Mogollón, pasa de los noventa y el más joven, Federico Navarro, tiene 10 años. Por eso es difícil hablar de relevo generacional, lo que sí podemos decir es que gracias a la organización de estas regatas se mantiene vivo el interés en la náutica y que gracias a la importancia que se le está dando a la vela en la Escuela Naval tenemos un excelente semillero de navegantes para toda Colombia. Así mismo el nivel que está alcanzando la Escuela Naval ha hecho más competitivos a las tripulaciones aficionadas.

 

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