Natalia Botero Acosta, PhD.
Conectividad. Un concepto con el que las ballenas jorobadas están bien familiarizadas. La historia de vida de las yubartas ondula entre dos extremos: áreas de alimentación polares, de altísima productividad y, zonas de reproducción tropicales, de aguas cálidas pero comparativamente menos productivas. Errantes por naturaleza, las jorobadas oscilan entre ayunos extendidos y temporadas en las cuales la ingesta se mide en toneladas métricas.
En el hemisferio sur, la Comisión Ballenera Internacional reconoce siete poblaciones (stocks A-G). El stock G migra cada año desde áreas de alimentación en el estrecho de Magallanes y la Península Antártica hasta zonas de reproducción en el Pacífico Sudeste (Nicaragua a Perú). Este considerable rango geográfico plantea un gran desafío: ¿Cómo estudiar una de las poblaciones más móviles del planeta?
La primera respuesta llegó con la foto-identificación. La cola de cada yubarta guarda un gran secreto. El filo, lleno de pequeñas muescas, y el patrón de coloración en un gradiente de negro y blanco son el equivalente cetáceo de una huella digital. Fue mediante los análisis de foto-identificación de Fundación Yubarta y colaboradores que supimos de la conexión migratoria entre Colombia y la Antártica hace tres décadas. Hoy, para Fundación Macuáticos Colombia son comunes las recapturas entre nuestro país y el continente blanco, así como aquellas entre los países de los corredores reproductivo y migratorio.
En los años 80s y 90s Fundación Yubarta y Susana Caballero colectaron las primeras muestras de tejido de ballenas jorobadas luego de la ejecución de comportamientos activos en superficie. En el Golfo de Tribugá seguimos dichos pasos en 2015 e incorporamos la metodología de biopsia remota desde el 2018. Cientos de muestras después no sólo hay confirmación del fuerte vínculo entre Colombia y Antártica. También hay sorpresas migratorias como la recaptura de un macho entre Nuquí y Samoa Americana, separadas por miles de kilómetros.
Finalmente, la implementación de marcas satelitales en Colombia se remonta a 2015 con esfuerzos de Conservación Internacional Colombia y Fundación Yubarta. En 2023, Fundación Macuáticos Colombia y el Laboratorio de Biotelemetría y Ecología Comportamental de la Universidad de California Santa Cruz implantamos marcas satelitales, en tres hembras maternas. Una de ellas advirtió del gran peligro que enfrentan las ballenas jorobadas en su migración anual, al enredarse en una malla pesquera en Perú.
En este sentido, si de algo pueden enseñarnos las ballenas es que nuestras fronteras son meras líneas imaginarias. Infortunadamente, nada de imaginarias tienen las diversas amenazas de conservación que afectan a una de las poblaciones más representativas del éxito en conservación biológica.
Los cantos son emitidos, exclusivamente, por machos como
un despliegue comportamental, asociados a la temporada reproductiva en aguas tropicales.
- Las ballenas son claves para combatir el cambio climático, cumpliendo un rol ecológico fundamental: son reservorios de carbono y al mismo tiempo liberan nutrientes claves para la productividad primaria.
- 9 000+ km es la distancia que recorren las ballenas jorobadas del stock G en sus rutas migratorias, a través de grandes corredores azules con diferentes niveles de protección y exposición a amenazas.
Dos de los enmallamientos fueron de complejidad intermedia
con heridas de desgaste e impedimentos a la movilidad. Por el contrario, los dos restantes fueron más severos e incluyeron en un caso cobertura total de la malla sobre el cuerpo de la ballena y en el otro amputación de la cola y parte del pedúnculo caudal.