Terminó recientemente la décima versión de Festiver, el Festival de Cine Verde que cada año se realiza en Barichara, Santander, pero que en esta ocasión se tuvo que hacer de forma virtual ante las restricciones derivadas del covid-19.
Su directora, la reconocida actriz y abogada Nórida Rodríguez, mira hacia atrás y reconoce que el trabajo no ha sido fácil: crear conciencia es uno de los procesos más complicados, dice. Sin embargo, siente que en el país y en el mundo sí se nota un cambio, que el mensaje de la sostenibilidad, aunque de forma lenta, ha ido llegando a la gente, en especial a las nuevas generaciones. Yo creo que hemos ayudado a tranformars muchas mentes y muchos corazones.
En el Festival de Cine Verde han sido múltiples las temáticas que han tenido en la pantalla grande la oportunidad de hacerse visibles, de provocar una reflexión de fondo sobre lo que estamos haciendo los seres humanos con el mundo. Por medio de las películas que se exhiben, los espectadores se han encontrado historias sobre el cambio climático, el consumismo y el deterioro de la biodiversidad, la mercantilización de la naturaleza, el impacto de los bonos de carbono, el uso de celulares y la adicción a redes sociales, el desperdicio de la comida, las energías limpias, los viajes en bicicleta, las ballenas en la Patagonia, el vegetarianismo, entre otros temas.
Durante estos 10 años hemos proyectado 670 películas y realizado más de 300 actividades académicas, lúdicas y ambientales con el mensaje de conservación, protección al medio ambiente y construcción de cultura ambiental que invitan a encontrar otras maneras de vivir, de relacionarnos con el planeta y de comprometernos con el cuidado de sus recursos naturales de manera respetuosa y sostenible. Podemos decir que en 10 años además de ser un Festival, nos hemos convertido en un movimiento, cuenta Toto Vega co-director de Festiver y también actor con amplio recorrido en la televisión y el cine.
La versión del 2020 fue un reto desde la planeación pues el mundo se movía en la incertidumbre por los efectos de la pandemia. Algunos eventos fueron cancelados, otros se aplazaron a la espera de una rápida vacuna que permitiera reprogramar en el corto plazo y muchos se trasladaron a virtualidad. Festiver optó por esa última opción. Así como hace 10 años no sabíamos cómo hacer un festival verde, en esta ocasión no sabíamos cómo hacer uno digital. Solo teníamos claro que tendríamos que hacerlo desde el corazón, que debía ser incluyente, mantener el espíritu de Barichara y que su objetivo tenía que seguir siendo crear conciencia ambiental, explica Toto Vega.
Con esa convicción, Nórida y Toto, quienes se definen como dos obreros ambientales, convocaron a su equipo de trabajo, se pusieron en contacto con los productores y comercializadores de diferentes países y lanzaron la convocatoria. La primera satisfactoria sorpresa fue recibir 174 películas de 23 países: Colombia, España, Argentina, Portugal, Francia, México, China, Bolivia, Ecuador, Canadá, Senegal, Chile, Bélgica, Marruecos, Venezuela, Perú, Polonia, Egipto, Reino Unido, Países Bajos, Alemania, Japón y Brasil.
Con entusiasmo, pero con incertidumbre sobre la participación que se pudiera lograr usando plataformas digitales, el festival se realizó del 17 al 20 de septiembre.
Tuvimos en el sitio más de 30 mil personas viendo contenido del Festival y más de 165 entradas a la página, lo que significa que la gente sí está interesada en el tema y esto no sucedía hace 10 años, dice Nórida Rodríguez. Creo que el tema de la pandemia tocó unas fibras muy íntimas de las personas, el covid hizo que despertaran y estuvieran más abiertas para el mensaje al estar encerradas y expuestas a tanta información, agrega.
Sobre el impacto de la pandemia en el proceso de generar conciencia en la población, Toto Vega, compartió durante el festival una reflexión del filósofo y ecologista brasilero Leonardo Boff tomada de su reciente texto Coronavirus: el perfecto desastre para el capitalismo del desastre. Un fragmento de ese artículo asegura que el actual sistema viola la ley más universal del cosmos, de la naturaleza y del ser humano: la interdependencia de todos con todos; no reconoce que somos parte de la naturaleza y que la Tierra no nos pertenece para explotarla a nuestro antojo; no existe ningún ser, mucho menos nosotros los humanos, como una isla desconectada de todo lo demás.
Para los organizadores, la edición de 2020 superó todas las expectativas, advirtiendo que el Festiver no se limita a la exhibición de películas. Este año también se realizaron talleres, conferencias, paneles, conversatorios, exposiciones 3D, un Mercado Verde y hasta experiencias de turismo virtual.
En la competencia nacional el primer puesto en la categoría Mejor Largometraje se lo llevó la película Las voces del nunca, documental dirigido y producido por Bernardo Restrepo que cuenta la historia del campesino colono en la región de la Orinoquía colombiana, una historia de éxodos y migraciones por la selva y el piedemonte llanero.
En la misma categoría el jurado otorgó Mención de Honor al documental Jaguar voz del territorio, del director Simón González, sobre la importancia de este felino en la cosmovisión de las comunidades indígenas de América.
Han sido 10 años promoviendo desde el cine un mensaje que invita al compromiso de todos con los principios de la sostenibilidad y el respeto por el medio ambiente. Se espera que el próximo año se pueda realizar la versión número 11 de manera presencial en el hermoso municipio de Barichara, si el covid lo permite.
Visita su página: festiver.org
